Las madres también lloran
Se murió su madre. De repente. En realidad la muerte siempre es inesperada, aunque se anuncie. Ahora era una hija huérfana y una madre con pequñxs. Me contó que lloraba a escondidas para que no la vieran sus hijxs. Le dije, llora. Llora mucho. Llora con todas las ganas. Llora hasta dormirte, si quieres. Si puedes. Le dije que estuviera triste. Que se sentara con sus hijxs a la hora de la merienda y les dijera, estoy muy triste. Voy a estar triste. Por eso lloro. Voy a llorar mucho. Muchas veces. Vosotros también podéis llorar. También podéis estar tristes. Me dijo que le decían que tenía que ser fuerte. Fuerte para qué, pienso. Qué es ser fuerte. Para quién. Una madre que llora es una madre de verdad. Es una madre que estará feliz otra vez. Me encontré una foto con un texto de un libro que era muy difícil de conseguir (acabo de descubrir que Anagrama ha comprado los derechos y lo edita en su colección Compactos) . La foto la compartió @noeolbes en su cuenta de I...